La lucha por mantener a los padres en la oscuridad es curiosamente intensa. ¿Por qué es tan secreto? A medida que los padres comienzan a hacer preguntas, algunos maestros y funcionarios escolares se han indignado y se han puesto a la defensiva, no de los estudiantes necesariamente, sino de sus propias ideas.
“GLSEN está entrenando a los maestros sobre cómo introducir su programa en cada aula, y parece que está funcionando”. Esto es lo que compartió Jill de Scottsdale, hablando acerca de a una maestra de la Escuela Secundaria Altadena que animó a los estudiantes de sexto grado a borrar las líneas de diferencia, entre niños y niñas. La cobertura de un noticiero (en inglés) citó a la maestra diciendo: “Mientras que esta generación crece, esperamos que para las generaciones que vienen detrás, esa línea desaparezca por completo y no haya línea (de diferencia entre niños y niñas) y seas libre de ser quien sea que quieras ser y vestirte, actuar y hacer lo que sea que quieras hacer, porque eso es lo que eres”.
Jill se centró en lo que ella ve, un gran deseo de la maestra de entrenar a los estudiantes a desconfiar de sus padres debido a que las “generaciones mayores” tienen absolutamente otro punto de vista biológico de la sexualidad humana. La maestra dijo: “Para la mayoría de la gente esa línea ya no es una línea rígida. ¿DE ACUERDO? Esa línea se desvanece. Todavía hay personas en nuestra sociedad, especialmente entre las generaciones mayores, para las cuales esa es una línea rígida. Así es como crecieron. ”
La Red de Educación Gay, Lesbiana y Heterosexual (GLSEN por sus siglas en inglés), es una organización activista que tiene como objetivo integrar su agenda en el currículo de las escuelas públicas y las actividades después de la escuela. Su sitio web resalta: “Coordinamos una red de 43 capítulos en 30 estados alrededor del país, para garantizar que tengamos acceso a escuelas y distritos en todo el país para alcanzar a todos los estudiantes”.
En un correo electrónico de oposición al proyecto de ley respaldado por CAP acerca de los derechos de los padres HB 2161, GLSEN envió puntos de discusión para argumentar en contra del derecho de un padre para dirigir la educación de sus hijos. Incluyeron esta revelación: “Los jóvenes LGBTQ + deben tener la habilidad de administrar su identidad sin interferencia de los padres o las escuelas” (probablemente las escuelas que estén bajo las restricciones del proyecto HB 2161). De acuerdo con el modelo educativo de GLSEN, los padres no tienen lugar en la vida de sus hijos cuando se habla de “administran su identidad”. Aparentemente, eso debe dejarse en las manos de los activistas LGBTQ.
El correo también incluye este video (en inglés) de una maestra de quinto grado en Phoenix que es transgénero y miembro de GLSEN.
La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU por sus siglas en inglés) también envió un correo electrónico preguntándole a los maestros si estarían dispuestos a violar la ley con tal de enseñar la “verdad” de la historia. El correo electrónico pinta un cuadro en el que a los maestros se les “prohíbe” enseñar la historia “precisa y equitativa” acerca del “racismo sistemático” y los temas LGBTQ +, entre otras cosas. En un momento en que los padres de todo el país están rechazando la teoría crítica de la raza (CRT por sus siglas en inglés), el aprendizaje socioemocional (SEL por sus siglas en inglés), la diversidad, la equidad y la inclusión (DEI por sus siglas en inglés), La ACLU caracteriza cualquier interferencia de los padres o legisladores como “censura y discriminación”.
Nuestros amigos de Alliance Defending Freedom (ADF por sus siglas en inglés) están defendiendo legalmente los derechos de los padres, incluso en un distrito escolar en Wisconsin que afirma (en inglés) que los padres “no tienen derecho a conocer la identidad del género de sus hijos. Esa información se tiene que ganar”. Se sospecha, que los padres se ganan ese derecho al estar de acuerdo con los funcionarios escolares que afirman la transición. ADF está desafiando la política del distrito, que prohíbe a los maestros notificar a los padres sin el consentimiento del estudiante y requiere que los maestros mientan a los padres usando el nombre propio y los pronombres del niño cuando los padres están presentes.
Esto nos da una idea de por qué el proyecto de ley HB 2161 es necesario, y por qué CAP también apoya el proyecto de ley SB 1211 (en inglés), que garantiza que los padres tengan un acceso razonable a los materiales y actividades de instrucción. El proyecto HB 2161 garantiza que los padres tengan acceso a los registros médicos y educativos de sus hijos, junto con cualquier encuesta antes de que se les entreguen a los niños. Y el proyecto SB 1657 (en inglés) aumenta la elegibilidad para las Cuentas de Becas de Empoderamiento (ESA por sus siglas en inglés) para que más familias de Arizona tengan opciones cuando se trata de elegir un entorno educativo para sus hijos.
Noticias del Capitolio
Fue una gran semana para los proyectos de ley respaldados por CAP.
Los tres siguientes proyectos de ley fueron aprobados por el Comité Judicial de la Cámara de Representantes siguiendo las líneas partidistas. Cathi Herrod testifico a favor de los tres proyectos de ley, abogando por la protección de la vida, las mujeres y los niños. Los proyectos de ley ahora pasan al Comité de Reglas y luego a una votación en la Cámara de Representantes.
SB 1138 protege a los niños que luchan con aceptar su género y prohíbe las cirugías experimentales e irreversibles relacionadas con el género para menores. Escuche mi testimonio aquí (en inglés) al 2:47:17.
SB 1164 protege a los bebés en el vientre y a sus madres de los daños del aborto al limitar el aborto a 15 semanas de embarazo. Escuche mi testimonio aquí (en inglés) al 47:19.
SB 1165 protege a las atletas femeninas y garantiza la igualdad de condiciones para todos al prohibir que los hombres biológicos compitan contra niñas y mujeres. Escuche mi testimonio aquí (en inglés) al 1:48:25.
También esta semana, el Comité de Salud y Servicios Humanos del Senado aprobó por unanimidad el proyecto de ley HB 2659 (en inglés), asegurando que no se discrimine en contra de los arizonenses con discapacidades a la hora de requerir un trasplante de órganos.