La gobernadora Katie Hobbs comenzó el 2024 con un claro ataque en contra de los padres y sus hijos. En su primer movimiento del año, Hobbs explicó su plan para expulsar a las familias del popular programa de Cuentas de Becas de Empoderamiento (ESA, por sus siglas en inglés) y limitar las opciones educativas con las que cuentan los padres al incluir al gobierno en el sistema de educación privada.
Durante su reporte de estado, la gobernadora de Arizona, Katie Hobbs, aprovechó el momento en la Cámara de Representantes del estado de Arizona para abarrotar con su retórica en contra de las familias y trivialidades izquierdistas.
La gobernadora Hobbs pasó la mayor parte del tiempo insultando a los padres de Arizona y promoviendo una enmienda constitucional extrema sobre el aborto, que utiliza un lenguaje vago y amplias exenciones para legalizar el aborto hasta el momento de dar a luz y eliminar las normas de seguridad para proteger a las niñas y las mujeres y no desempeñando su deber como gobernadora “a favor de todos los arizonenses” como ella lo prometió hace un año.
Pero esto ya se veía venir porque el martes de la semana pasada, antes de su discurso de reporte de estado, la gobernadora Hobbs ya había dado a conocer su plan de conquista a los medios de comunicación frenéticos. Matt Beienburg, del Instituto Goldwater, hizo un trabajo estelar al destrozar sus falsas afirmaciones, revelando su postura en contra de los padres. A continuación, te damos un resumen de cada uno de los puntos que ofrece Beienburg. Te invitamos a que leas el informe completo (en inglés).
1.) La afirmación que Hobbs hace de querer proteger a los estudiantes con discapacidades al obligar a las escuelas privadas a aceptar estudiantes de educación especial, da la falsa impresión de que no lo han hecho en el pasado. En realidad, los estudiantes con discapacidades constituyeron la mayoría de los estudiantes inscritos en el programa ESA por más de una década. De hecho, la gobernadora Hobbs, que también recibió una educación privada, votó en contra del programa ESA para estudiantes con discapacidades en el 2011.
2.) La afirmación que Hobbs hace de querer aumentar la seguridad de los estudiantes al exigir la toma de huellas dactilares y la verificación de antecedentes, da la ilusión de que las escuelas privadas no son seguras. Cuando, en realidad, la mayoría, si no todas, las instituciones privadas ya requieren tales medidas de seguridad.
3.) La amenaza de Hobbs de pedir rendición de cuentas de los gastos en el programa de ESA es un esfuerzo por realzar un tema de conversación vacío que usan los grupos en contra de los padres. En realidad, todas y cada una de las compras bajo el programa ESA ya están sujetas a revisión. El presidente de la Cámara de Representantes de Arizona, Ben Toma, señala que las escuelas públicas no están sujetas al tipo de “rendición de cuentas” propuesto por Hobbs. Además, cada estudiante en el programa ESA recibe miles de dólares menos que los estudiantes de una escuela pública.
4.) La afirmación de Hobbs de querer “prohibir el aumento abusivo de precios” mediante la institución de control de precios es un intento de apoderarse de las escuelas privadas basándose en un problema que no existe. De hecho, la colegiatura promedio de una escuela privada es aproximadamente la mitad de lo que cuesta educar a un estudiante en una escuela pública. Además, señala Beienburg, las tasas de colegiaturas de las escuelas privadas han aumentado más lentamente que los aumentos del gasto de las escuelas públicas.
5.) La afirmación de Hobbs de querer “elevar los estándares educativos” al obligar a las escuelas privadas a contratar maestros aprobados por el gobierno es otro intento de tomar el control de la educación privada sin ninguna razón. Los investigadores han descubierto que los requisitos de enseñanza aprobados por el gobierno hacen poco para mejorar los resultados educativos.
6.) El intento de Hobbs de restablecer el viejo requisito de que un estudiante asista a una escuela pública por 100 días antes de poder calificar para el programa ESA es simplemente un obstáculo arbitrario que beneficia al gobierno, mas no al estudiante.
7.) Quizás el intento más claro de tomar el control de la educación privada y arrebatársela de las manos de los padres es el plan de Hobbs de extender la autoridad del Auditor General del estado. Con el pretexto de la transparencia, Hobbs quiere que el estado supervise lo que la ley de Arizona claramente ha dado a las familias y a las escuelas privadas. Las familias bajo el programa ESA renuncian a la mayor parte de los fondos asociados con la educación pública para proporcionar a sus hijos la educación que mejor se adapte a ellos. Son los padres, no el gobierno, los que deben pedir cuentas a las escuelas privadas.
Te invitamos a que leas la evaluación del Instituto Goldwater (en inglés) para obtener más detalles sobre cada uno de sus puntos abreviados aquí.
Esto nos muestra que el estado de Arizona necesita nuestras oraciones. Este lunes nuestro equipo junto con cerca de 200 pastores y líderes cristianos de todo el estado nos dimos cita en el Capitolio del Estado de Arizona para orar por nuestros líderes gubernamentales.
Te invitamos para que te también te unas a nuestro equipo de oración. Para más información conéctate con Proyecto por la Familia de Arizona en Facebook y danos un Like.